Cultura de capacitación: una necesidad inevitable
| Opinión
Por Orlando Niemann
Director Ejecutivo N&M International

Mi nombre es Orlando Niemann. Mi educación superior y mis estudios de especialización se conjugaron con el fin de liderar y servir como consultor en el cumplimiento de los reglamentos, procedimientos y rentabilidad de la industria de carnes.
A través de esta columna mensual que debuta el día de hoy, les informaré como la educación de nuestro capital humano contribuye a los logros, la producción y hasta a la rentabilidad de cualquier planta de procesamiento.

No cabe duda que buscamos conferir un enfoque eficaz y funcional a cada uno de nuestros clientes, donde las recomendaciones transmitidas se adapten en la práctica y sean en beneficio de su organización.
La escuela de la vida nos señala que el conocimiento se transmite de manera directa. Además, todos los problemas y las variantes se resuelven con palabras.
En la industria, los más expertos entrenan a los nuevos trabajadores en el oficio productivo. Esta teoría de aprendizaje no es una formación ni una capacitación dirigida. Debemos implementar una filosofía de trabajo en nuestras empresas, es decir, debemos crear una “cultura de capacitación”.
Me enorgullece implementar dicha cultura a lo largo de mi trayectoria de consultor, por lo que aún aconsejo empresas en la compra de nuevas tecnologías, la aplicación de insumos y materiales y la modificación de procedimientos industriales.
Sin embargo, a la misma vez, existen organizaciones que desconocen el beneficio de capacitar a su capital humano.
El personal de la planta, mediante este modo de capacitación, aprenderá no solo sobre la tecnología que lo rodea a diario, sino también sobre sus habilidades y su disposición para superarse en el cumplimiento de sus funciones. Lo anterior resulta, entre otros beneficios, en el uso correcto de materiales, reducción de desperdicios y hasta mayor eficiencia y productividad.
Concluyo aquí, subrayando que la capacitación no es desembolso; por el contrario, debe ser vista como una inversión de la empresa.