Una especie que viste de color al invierno

El verano ya pasó, eso se nota en los viveros, donde está llegando una de las plantas más coloridas del invierno: la violeta de los Alpes, cyclamen, o el llamativo sobrenombre de pan de ganado porcino, debido a que sus raíces amargas son alimento apreciado para los cerdos en los campos Europeos. Es un género de plantas de tubérculo y sus flores van del rojo, pasando por el fucsia, los morados, matizados y hasta el más puro blanco.
Si hablamos de sus propiedades y composición podemos decir que:

En la antigüedad, el cyclamen era reconocido por sus virtudes terapéuticas, debido a la presencia de cyclamina, sustancia amarga con poderes laxantes en homeopatía . Cyclamen europaeum es un remedio de base en homeopatía, que cura las depresiones y mal de amores.
En la actualidad se sabe que es una planta venenosa para el hombre y para los animales de companía. Los tubérculos contienen sustancia tóxica, la cyclamina, una saponina glucosídica de muy elevado poder hemolítico, vomitivo y purgante, podría tener algún poder antitumoral. Por el contrario es inocua para muchos animales, como el cerdo, el puercoespín, etc, que se lo comen a gusto. Pero atención, es un violento purgante de gran toxicidad para nuestras mascotas: los síntomas tras la ingestión de ciyclamen son: trastornos gastrointestinales con vómitos, fuertes diarreas, malestar general y dolor abdominal, convulsiones, insuficiencia renal y parálisis.
Algunos consejos de como cuidar una planta de Ciclamen.:
. Sacarle todas las hojas amarillas, extraidas desde la base o tronco, porque estas liberan una espora u hongo que termina afectando y contaminando toda la planta. También es importante quitarle las flores que se van secando, no solo el capullo, sino todo el tallo entero De esa manera, no se deteriora el resto de la planta. Sobre todo porque son muy prolíferas en su floración.
. Requiere abono, ya que en esta época sobretodo, es cuanto más nutrientes consume la planta. Debemos abonar desde otoño hasta la primavera. Si es un abono líquido, lo aplicaremos en disolución con agua de riego una vez por semana, si por el contrario se trata de un abono sólido, directamente sobre el sustrato, para que vaya liberando lentamente los nutrientes con la humedad y volveremos aplicarlo cuando ya haya desaparecido el anterior.
. Durante el momento del riego, debemos evitar mojar las flores, hojas y especialmente el bulbo, ya que demasiada humedad en el interior de la planta ,puede perjudicarla. La frecuencia del riego dependerá de las condiciones ambientales, pero como orientación, puede ser que necesite cada dos o tres días y a medida que los días se hacen más cortos y las temperaturas bajan, las necesidades de agua se reducen , por lo tanto con la llegada del invierno el riego será más espaciado. Generalmente se echa el agua en el posamacetas, dejando que la planta lo absorba durante 20-30 minutos, luego se escurre el agua eventualmente en exceso y se quita el posamacetas.
. Atención, los síntomas de un cyclamen al que le falta agua, son los mismos que los de exceso de humedad, en los dos casos el cyclamen manifiesta su malestar, poniéndose mustio, y con las hojas y las flores desmayadas, la clave para saber cual es el problema será comprobar, el nivel de humedad de la tierra.
. Use agua fría para que los tejidos , las hojas y las flores caídas recobren fuerza. El agua con residuos de cloro no favorece al cyclamen, pero el agua de lluvia o el agua gasificada de mesa sí.
. La Violeta de los Alpes prefiere lugares en donde reciba la luz de las primeras horas de la mañana. No obstante, también se aclimata en sitios donde la luz no da directo pero si circula aire.
. Use macetas de arcilla para plantar el Cyclamen y coloque en el fondo de las mismas una capa de carbón, pedregullo o restos de macetas. Coloque la Violeta de los Alpes adecuadamente en el centro de la maceta y agregue el sustrato hasta llegar al nivel de plantación, a un centímetro del borde de la maceta, dejando la parte superior del rizoma fuera.
Mucha gente prefiere cultivarlas en interior pero, como por lo general las temperaturas dentro de un hogar rondan los 25ºC, es muy caluroso para ellas que prefieren siempre temperaturas que oscilen en alrededor de 13 a 18ºC . El mejor lugar es por lo general un sitio sin calefacción, como puede ser un jardín de invierno o incluso galerías, patios y balcones con cierta protección contra las heladas de más de 2ºC bajo cero, las que suelen tolerar.
. Cuando el invierno haya terminado, y la próxima primavera traiga días de calor, traslade la planta a la sombra y lugares frescos y protegidos. Así, quizá la planta renazca al año siguiente… pero por ahora VISTAMOS DE COLOR AL INVIERNO.